Dijo al Caballo el Gorrión:
«Tu comedero está lleno,
Mientras yo bostezo y peno
Sin migaja de ración.»
«Dos granos menos o más
¿A ti qué te importa, di?
¿Podré tomarlos de aquí
O tú te incomodarás? »
Y el Caballo respondióle:
«Trátame con más confianza;
Hay para entrambos, y alcanza
Para tu amada y tu prole.»
—«¡Gracias! trinó el pajarito,
Y sin temor ni querella
Comieron de una gamella
Como hermano y hermanito.
Vino el verano, y con él
Mil moscas desesperantes
Que de su sangre anhelantes
Cayeron sobre el corcel.
Pero el Gorrión sin esfuerzo.
Sirvióle de policía.
Pagando así cada día
El hospitalario almuerzo.
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