George casi se sofocó de indignación. -¿Así, pues, usted cree que yo pertenezco a esa clase de hombres capaces de tales asuntos? ¡Me cree capaz de tal acción! ¿Por quién me ha tomado usted...? Casi perdió la cordura. Sin embargo, Cloete no se inmutaba. Sólo palideció un poco en la parte del rostro que rodeaba sus narices. -Yo le he tomado por un hombre que, en la miseria, dentro de poco, no tendrá ni un cuarto. ¿Por qué se indigna usted? ¿Es que yo le propongo que robemos a la viuda y al huérfano? ¡Ah, amigo mío! El Lloyd es una corporación, y esto no matará a nadie de hambre. Son cuarenta, al menos, los que han asegurado el estúpido barco. Nadie sentirá frío ni calor. Ellos tienen en cuenta todos los riesgos. Todos, fíjese bien, todos... Una conversación acerca de esto. ¡Esto! George, totalmente desconcertado, ante cada contestación agitaba los brazos. Pero de pronto, ¿comprende usted?, el otro, con la espalda vuelta hacia la chimenea para recibir calor, continuó hablando: -El negocio de la pulpa de madera estaba a dos dedos de quebrar. El negocio de las frutas en conserva a punto de terminar en desgracia... Usted tiene miedo. La ley se ha hecho sólo para los imbéciles... Y le explicó cómo el barco podría hundirse lejos y con toda seguridad, y cómo sería pagado el seguro. No habría ni la menor sospecha. Luego, asunto terminado. El barco tenía que acabar alguna vez.
"George nearly chokes ... So you think I am of that sort — you think ME capable — What do you take me for? ... He almost loses his head, while Cloete keeps cool, only gets white about the gills ... I take you for a man who will be most cursedly hard up before long ... He goes to the door and sends away the clerks — there were only two — to take their lunch hour. Comes back ... What are you indignant about? Do I want you to rob the widow and orphan? Why, man! Lloyd's a corporation, it hasn't got a body to starve. There's forty or more of them perhaps who underwrote the lines on that silly ship of yours. Not one human being would go hungry or cold for it. They take every risk into consideration. Everything I tell you ... That sort of talk. H'm! George too upset to speak — only gurgles and waves his arms; so sudden, you see. The other, warming his back at the fire, goes on. Wood-pulp business next door to a failure. Tinned-fruit trade nearly played out ... You're frightened, he says; but the law is only meant to frighten fools away ... And he shows how safe casting away that ship would be. Premiums paid for so many, many years. No shadow of suspicion could arise. And, dash it all! a ship must meet her end some day...