Un Payo tonto quería
que con él, a pasear,
fuese un Colegial un día;
pero el Colegial tenía
muchas cosas que estudiar.
Y lleno de admiración,
¡estudiar! el Payo dice:
esa es jerrada opinión.
No estudie, que en conclusión
será usté más infelice.
Para que vea que lo quero,
le haré una buena alvertencia:
sea tonto, sea majadero
que si tiene usté dinero
será un gran pozo decencia.
Si en lo dicho habló verdá
este pobre Payo bruto,
allá el lector lo sabrá,
que yo, por mí, no disputo
cosa que tan clara está.