Iván vive todavía. A su reino acuden en tropel de todas partes. Sus hermanos también han venido a su casa y él los mantiene. A todos los que llegan diciendo: «¡mantennos!», les dice:
—¡Sea! Vivid: nosotros tenemos de todo.
Pero existe en este reino una costumbre,una sola: al que tiene callos en las manos se le dice: «¡Ponte a la mesa!», y al que no los tiene: «¡Come las sobras!».